Jennifer Stone
En este momento de mi vida, todo comienza a marchar como siempre quise, pero siento que todo puede desmoronarse como un castillo de naipes al abrirle la puerta a Samir esta madrugada.
No puedo comprender que es lo que quiere de mí, hasta que me dice que sabe lo de nuestro hijo.
— ¿Cómo me encontraste?— Cuestiono con miedo viendo hacia las escaleras.
— ¿Eso es lo único que te preocupa? ¿Cómo se llama mi hijo?—Pregunta Samir y yo todavía no salgo de la impresión de verlo frente a mí de nuevo
— ¿Esta arriba?— Pregunta, siguiendo mi mirada nerviosa.
— ¡Esta dormido!, por favor vamos a hablar. — Suplico, cuando veo que se dispone a subir las escaleras.
— ¿Ahora si quieres hablar Jen?, el tiempo de hablar termino. — Me responde zafándose de mi agarre
—Se va a asustar, no te conoce. — Gimoteo desesperada, no quiero que confunda a mi hijo, esta pequeño.
— ¿Y de quien es la culpa?— Me pregunta acercándose a mí, veo tanto odio en su mirada que no puedo evitar temblar de