Katherine entró a la casa para ver a Felicity parada junto al sofá con los brazos cruzados sobre el pecho, suspiró y supo que la estarían interrogando, -pequeña Lee-
-¡No me llames así!- Felicity advirtió.Katherine exhaló un suspiro, -Felicity, tengo entendido que estás enojada, pero esto es lo que se espera. No puedes esconderlos para siempre--No quiero que él sepa sobre ellos. Por el amor de Dios, tía Katy, no quiero tener nada que ver con él en mi vida de nuevo- -Pero sabes que eso no es posible. No importa lo mucho que quieras sacarlo de tu vida, no puedes. Mientras tengas los hijos, él estará atado contigo con ellos- -No si él no sabe de ellos. Lo quiero fuera de mi vida y fuera de la de ellos. ¡No merece estar con ellos, no merece tenerlos!--Eso es como decir que no es su sangre la que corre por sus venas- -Si digo que no, no lo es- Katherine suspiró, -Felicity...- -Tía Katy, por favor-, levantó la mano para det