~Pov de Alisha~
«¡Mierda! si Marcus no me mato, Damien si lo hará» rumié para mis adentros, recostando la cabeza en el sofá. Sentí el frío de las compresas que Mike me había traído, aliviando la quemazón en mi cuello.
Ese bastardo había ejercido tanta fuerza que estoy segura de que si no hubiera apretado los brazos con todas mis ganas, me habría asfixiado. Por supuesto, el desgraciado se llevó un recordatorio de mi agarre en su brazo.
«Esto es la guerra» Y aunque la adrenalina aún corría por mis venas, no me atrevía a abrir los ojos para mirar a Damien. Sabía que me reprocharía el porqué Marcus le había dicho que yo había invadido su territorio.
Solté un suspiro lento, esperando. Pasaron varios minutos, pero él no profirió palabra alguna. Con cautela, abrí un solo ojo para echar un vistazo.
Y para mi sorpresa, lo encontré frente a mí, de pie. La botella de whisky sobre la mesa estaba ya a la mitad. El desconcierto me invadió por completo. Desde mi posición, pude ver sus ojos envu