Elena había pasado la noche intentando ignorar los pensamientos que la mantenían inquieta. A pesar de su determinación de mantener la cabeza fría, las palabras de Alejandro seguían resonando en su mente. …Déjame cuidar de ti...
Despertó antes de que el sol asomara en el horizonte., su mente había estado inquieta, entrelazada con los pensamientos que Alejandro había sembrado la noche anterior. Se sentó en el borde de la cama y recordó todo lo ocurrido en el apartamento de Alejandro. Sabía que ese día había marcado el inicio de algo nuevo, aunque aún no estaba segura de si aquello era bueno o malo.
A pesar de haber dormido pocas horas, se sentía renovada y de muy buen ánimo. Sentía como si hubiera recargado nuevas fuerzas. Además el nuevo tratamiento de Valeria la llenaba de esperanzas, la tenía entusiasmada…y lo vivido el día anterior con Alejandro también tenía mucho que ver, aunque se negara a reconocerlo. Se levantó con cuidado y se acercó para darle un vistazo a Valeria. Su hermana