Daisie se sorprendió. Ella le agradeció silenciosamente a la profesora y se fue.
En los suburbios…
El padre de Lisa recogió los artículos de su esposa y empezó a llorar al ver su foto familiar.
Lisa, que vio todo, apretó los puños, se dio la vuelta y caminó hacia su habitación sin expresión. Sacó todo lo que Daisie le dio, lo metió en su mochila y salió.
Había un cibercafé al final de la calle, y sabía que su hermano Evan y su grupo pasaban el rato allí. También sabía que Evan tenía allí una "jefa" a la que los chicos llamaban "Ivanka".
Ivanka era la dueña del cibercafé, pero parecía que tenía mucho dinero. El coche deportivo rojo que siempre estaba estacionado afuera le pertenecía a ella.
Lisa entró en la tienda y se dirigió a la caja. El encargado estaba comiendo un bocadillo mientras jugaba y no la notó.
Lisa dudó momentáneamente antes de hablar. "¿Está Ivanka?".
"Está...". El hombre levantó la vista y vio que no era más que una chica que parecía menor de edad, así que dejó