Karim.
Después de relajarme con Cristal y lograr un avancé voy en busca de Hasam, tengo algo muy importante que decirle y necesito que no allá oídos indiscretos que es algo muy importante que tengo que discutir, lo localizo sería de los baños de las mujeres, maldito depravado cuantas veces vamos a tener este problema, me coloco detrás de él y saco la daga qué siempre cargo en mi persona colocandosela en los riñones.
-Creo que alguien necesita una ducha fría y un castigo por adulterio.
-Lo siento gran sultán solo fue un pequeño tropiezo.
-Si te vuelvo a ver aquí te volveré un heunuco más.
-¡ No por favor mi gran señor, le pido su perdón le prometo con mi vida qué no lo volveré hacer !
Escucho como Hasam comienza a pedir clemencia con desesperación y mucho miedo, logrado mi cometido lo suelto y lo miro con una sonrisa burlona.
-Te asuste.
-Mi gran señor si me disculpa por un momento pensé que si lo aria.
-Todavía te necesito pero es enserio que dejes de hacer estas cosas o tendre que to