Todos creen que ser de la realeza solo son fiestas lujosas, vestido bonito, joyas hermosas y siempre lucir hermosa pero nadien quiere ver la realidad que todo esto oculta, siempre tener que ver detrás de tu hombro y desconfiar de todos, es una jaula de oro y joyas de la que solo deseas que alguien te de un respiro.
Ler maisCristal.
Desde que nací me destinaron para ser reina, crecí rodeada de lujos y cosas hermosas, todo era mejor cuando era pequeña no sabía el mal que me rodeaba pero aprendí que el mundo es cruel demasiado joven incluso aún para comprenderlo y ahora me doy cuenta, comenzaron a instruirme en cómo actuar, como sentarme, cómo comer, cómo vestir, como hablar, querían manejar cada aspecto de mi vida ni siquiera era libre de reírme a mi antojo siempre tenía que mantener una expresión serena y calma, no podía hacer nada sola siempre había alguien vigilándome decían que tenían que cuidar a la futura emperatriz, nunca tuve amigos siempre estuve sola a pesar de que estaba rodeada de sirvientes, los únicos respiros que tenía era cuando miraba a mi madre que no era muy seguido me instruyó y me enseñó todo lo que sabía, al crecer más me empezaron a instruir en la política para ayudar y aconsejar al emperador todo eso fue una estupidez y una pérdida de tiempo horas que desperdicie inútilmente, cuando cumplí 18 fue el momento en que uniría mi vida al hijo del emperador y así gobernar el imperio a su lado, ese día sentí en el estómago un nudo, las manos me temblaban y me sudaban, sentía tantos nervios que las piernas me temblaban como las hojas al viento, esta va a ser la primera vez que miraba a mi esposo en persona, dejaría de ser de la familia Aqua y pertenecería a la familia Nifet perdería toda identidad y pasaría a ser un miembro más de la realeza, al llegar frente al sacerdote mire de reojo a mi futuro esposo, era un hombre muy guapo, alto, de hombros anchos, con piel de porcelana, cabellos dorado como los rayos del sol y de ojos azules, era mucho más hermoso que los retratos que mire de él que no le hacían justicia, la ceremonia fue larga pero al finalizar pude dar mi primer beso en mi vida fue corto y seco, supuse que era por que él también tendría nervios este día, fui una tonta, la ceremonia acabó y era la hora de la primera noche con mi esposo me llevaron a una habitación donde me retiraron el vestido de novia, los adornos del cabello, me dieron una ducha con agua perfumada y me pusieron un ligero camisón blanco de la mejor seda, me escoltaron hasta una habitación que al entrar estaba levemente iluminada, esperé unos minutos pero el emperador no llegó seguí esperando hasta que amaneció y salió el sol, él jamás vino pensé que había hecho algo mal que tal vez había ocurrido algo con él, intentaba buscar una excusa para justificar su comportamiento, salí de la habitación y me dirigí al cuarto donde me quitaron el vestido y al abrir la puerta estaba mi fiel dama de compañía Ana, ella siempre estuvo a mi lado desde que tenía 10 años ella es solo unos años mayor que yo, me prometió que jamás se casaría y que siempre estaría a mi lado cuando era joven pensé que era amistad pero ahora comprendo que ella nunca podría casarse ya que es la hija del amante del duque, no tiene prestigio nadie sabe quién es su madre ni siquiera ella ningún hombre se arriesgaría a tener hijos de una bastarda pero a pesar de que la gente habla basura a sus espaldas eso no afecta para nada su buen humor y actitud dulce, amable y cariñosa, me dio una sonrisa y me acompaña al baño que ya me tiene preparado, me viste con un vestido azul para acompañarme al salón de banquetes donde se celebrará el segundo día de la boda, al entrar al lugar todos me miran de reojo con lástima y algunos con desprecio me anuncian y hacen reverencia pero aún así nadie quita esa mirada de mí persona, camino hacia los tronos para tomar mi lugar al lado de mi esposo ausente pero al llegar veo algo que me toma por sorpresa está una chica de cabellos rojizos, ojos verdes y de piel blanca como la nieve sentada en mi lugar, la miró fijamente ya que debo de guardar la calma y no debo ser un espectáculo de esto, tal vez es alguna extranjera y no sepa las reglas de este lugar, ella me mira de forma burlona y la acompaña con una sonrisa a su rostro, volteo ver a mi esposo en busca de alguna explicación y él solo le pide a la chica que se levante y se vaya que después estará con ella, tomó mi lugar pero mi esposo me ignora completamente así es toda la fiesta, una fiesta que era para las demás personas, cuando todos los duques, marqueses y lady se retira voy a la sala común del emperador para hablar con él, conocernos mejor, en la puerta están dos guardias que intentan un impedirme el paso, cómo se atreven a darle órdenes a la emperatriz que desfachates, les dejo en claro que no importa lo que me digan entraré a este lugar pero al abrir la puerta me arrepiento totalmente y desearía que el mundo se viniera abajo, está mi esposo en brazos de esa mujer pelirroja intento mantener la calma y pedir una explicación y solo me dijo mi realidad asquerosa realidad que él no me amaba ni me amaría nunca que solo se casó conmigo por compromiso y que esa mujer era su verdadero amor que ella incluso tendría un título mayor que el mío, sentí que todo lo que me había enseñado se fue a la basura, mi madre me había dicho que era normal que los emperadores tuvieran amantes pero jamás pensé que esto me pasaría tan pronto a mí, sé que no soy una mujer fea pero ni siquiera me dio una oportunidad así pasan los años solo siendo un objeto en este palacio, que solo me presento para asuntos diplomáticos pero no con mis palabras solo con presencia ya que el emperador es el que habla, intenté dar mi opinión en varias ocasiones pero no terminó muy bien, solo me dejaba en claro que solo era un objeto más en este palacio, los primeros años me atormente a mí misma pero con el paso del tiempo fue importándome menos que la gente hablara a mis espaldas, que no podía mantener a mi marido feliz, que era una inútil como mujer o que ni siquiera había podido dar heredero al rey como aria ese milagro si mi esposo nunca me a tocado, la única que siempre estuvo a mi lado fue Ana que me animaba con sus conversaciones y sus paseos por los jardines llenos de flores, habitualmente el emperador abría la boca sin pensar terminaba ofendiendo a alguien pero esta vez se equivocó grandemente ya que la persona que insultó tenía los medios para hacerle frente y no dudó en hacerlo, a los pocos días nos declararon la guerra pensé que iba a ser algo paulatino pero estas personas no se van con rodeos atacaron la capital de forma silenciosa y meticulosa tomando el castillo en total en cuestión de minutos, Ana vino a mi habitación realmente asustado y me ofreció escapar por los pasadizos secretos del castillo y sacarme de aquí pero con qué objeto, no tengo vida alguna, salga o no, no tengo amigos, mi familia solo me miró como un buen trato que pudieron hacer con el imperio, preferiría morir en este lugar que quedar como una cobarde y morir después sin dignidad, me niego y le ofrezco a ella esa salida pero me dice que me acompañará incluso en la muerte, no tardan en encontrarnos nos toman de forma brusca de los brazos y nos llevan al salón principal donde están los tronos, al entrar miro a mi esposo y a su amante arrodillados frente a los tronos, creo que no alcanzaron a escapar, me asen arrodillarme a su lado, incluso el día de mi muerte tengo que soportar la presencia de está mujer vulgar.-Pero miren que dilema, ¿Que voy hacer ahora con ustedes?Me llama la atención la voz gruesa de un hombre al ver al frente miró sentado en el trono del rey a un hombre joven, alto, de piel morena, cabellos castaños y de ojos verdes que nos miran fijamente y de forma asesina.-¡Por favor sultán Ismael Karim perdóneme la vida, fui un arrogante con mis palabras y mi actitud le suprico su perdon.-Claro que fue una arrogante e idiota y no vine hasta aquí para solo perdonarle la vida, usted fue el único hombre que me ha insultado y se atrevió a tocarme, nadie puede tocar al sultán no importa quien sea pero en vez de aplicarle el castigo de mi país haremos lo que se hace aquí en su reino ¿dígame qué pasa con el que se atreve a tocar al emperador?Miro a Víctor de reojo y su cara es de puro pánico ya que aquí las leyes son claras el que se atreve a tocar al emperador es ejecutado, vaya hasta que alguien le dara lo que se merece, el sultán Ismael nos mira a mí y a María que está llorando y su cara está llena de pánico, en mi interior me siento un poco feliz de verla si mi vida no estuviera en juego me estaría riendo de ella.-¿Quién de ustedes es la emperatriz?El sultán Ismael hace esa pregunta que su respuesta es más que obvia y no puedo evitar sentirme un poco insultada que me confundan con la amante del emperador es rebajar mi persona a lo más bajo del mundo, toda mi vida me dijeron que no alzaron la voz pero el día de hoy voy a morir y si voy a morir prefiero que sea antes que la amante de mi esposo, quiero ser la primera en algo entre nosotras, me levanto del suelo y lo mío con una mirada fría y le hablo sin miedo alguno en mi voz.-Su respuesta ofende sultán la única y verdadera emperatriz soy yo.-¿Entonces quién es la mujer que intentó escapaba con el emperador.El poco orgullo que me queda me impide decirle que es la amante de mi marido y que ha tenido durante años, solo volteo el rostro hacia otro lado, lo escucho reírse en su rostro tiene una sonrisa poco sádica.-Ya comprendo, hay que hacer algo divertido emperador ¿A quién elige salvar a su amante o a su esposa?-María.Este desgraciado sin dudarlo decide salvar a su amante pero en verdad no me sorprende su respuesta, jamás represente nada para él, el sultán se levanta del trono y se dirige a Víctor para mirarlo con desprecio.-Entonces prefieres sacrificar a su esposa.Víctor me mira de reojo para después desviar la vista al suelo y a sentir de forma temerosa, maldito desgraciado quisiera ver su ejecución.-En ese caso tómen a la mujer pelirroja y ejecutenla junto con el emperador.-¡Que! Aguarde dijo que podía salvar a una de ellas dos.-Sí porque pensé que iba a salvar a su esposa pero qué clase de emperador, de hombre sacrifica a la mujer que tomó como esposa y la arroja a la boca de los leones como si fuera una simple presa y decide si salvar a su amante.Sultán Ismael lo mira con desprecio para después hacer un movimiento con su mano a los guarde y se los llevan de la habitación, se acerca a mí y da un par de vueltas a mi alrededor, lo miro con discreción, su ropa son ligeras y no traen mucha joyería y es extraño para hacer un sultán tengo entendido que son hombres vistosos.-Nos la llevamos.Eso me toma por sorpresa y antes de que pueda protestar o decir algo me toman del brazo y me empuja detrás del sultán.Cristal.Estos días de descanso han sido divertidos ya que Ana y Karim a veces discuten por ver quien me ayudara hacer algo incluso se pelean por lo más insulso como abrir las cortinas, Karim me ayuda a moverme de lugar cargando me apesar de mis protestas pero él insiste creo que le gusta, al principio los diplomáticos se molestaron al saber que Ana les daría mis respuestas pero después de que él medico les explico la situación comprendieron y me deciaron una recuperación pronta, aunque el dolor mi dolor y malestar desapareció ase días todos insiten en que descanse por mi bien principalmente Karim qué se queda todas las noches a mi lado despierto por si se me ofrece algo apesar de que para eso ya hay damas que velan mi sueño durante toda la noche, así pasan los meses y con ellos mi vientre crece cada vez más y cada vez me cuesta hacer cosas por mi misma, tengo que mandar hacer ropa ya que las qué poseo me han quedado epretadas y es algo que se me ase tan extraño siempre fui delgada pe
Karim.Regreso a mi habitación con cuidado de que nadie me mire, al entrar me recibe Hasam muy preocupado.-¿ Mi señor como le fue ?-Me fue bien pero necesito de tu ayuda y que tengas la mente abierta.-Lo que usted me pida, señor.-Necesito que tomes el trono de mi imperio.-¿¡ QUE !? Señor se a vuelto loco.-No, Cristal me a revelado algo que es muy cierto y de preocupación, ella no desea volver conmigo no desea volver a ser mi prisionera y al estar tan ceparados no podre estar viendo a mis hijos tan seguido.-Espere hijos, serán dos.-Si.-Felicidades señor pero regresando a lo otro no puedo tomar su lugar mi señor no soy de la realeza.-Pero si te casas con mi hermana mayor te convertirás en parte de la realeza y cuando decrine al trono tu lo tomaras y todo quedara resuelto.-Señor no creo que sea prudente tomar esa decisión.-No entiendes Hasam Cristal es la mujer de mi vida, es perfecta para mi, no puedo vivir sin ella estos meses sin ella han sido una tortura insoportable.-¿
Cristal.Cuando los labios de Karim tocan mi piel siento que el pulso se me acelera como antes y se muy bien que en cualquier momento mis mejillas cambiaran de color así que salgo de la habitación lo las rápido que me permiten mis pies, llego a mi salón privado un poco agitada preocupado a Ana que rápidamente me toma de la mano.-¡ Cristal ! ¿ Quiere que llame al medico ?-No estoy bien solo que ese hombre me pone nerviosa.-¿ Quiere que lo saquen del palacio ?-No podemos hacer eso Ana es de la realeza y ahora un invitado del palacio.-Como lo desprecio.Miro Ana un poco cansada y ella entiende me ayuda a llegar a un sillón en el cual me da una taza de té y descanso durante un rato intentando hacer un gorrito para mi bebe pero me queda todo disparejo, Ana me da ánimos diciendo que está hermoso pero no soy ciega para no ver lo evidente, hago otro y me queda igual de disparejo supongo que ya tengo el par para mis bebes. Pasan los días y no he tenido noticias de que Karim intentar hacer
Karim.Ya suponía qué Cristal me negaría mi primera petición así que saque mi segunda opción pero lo que no sabia es que me mandaría con un hombre alta y delgado de la tercera edad qué se mira amable, todo acaba y nos retiramos soy guapo por Baio por los pasillos asta que llegamos a una sala qué tiene un escritorio y dos sillas, el hombre nos ase un ademán para que tomemos asiento.-Dígame sultán Karim cuales son las mercancías qué desea exportar a nuestra nación.-Desearía exportar algunas especias, telas de ceda y algodón.-Eso suena bien a traído algo para comporvar la calidad.-Esta poniendo en duda la calidad de los materiales que exporte.-Claro que no sultán es para que los posibles compladores puedan verla.-Si ese es el castigo mandare a traer algunas de la mejor calidad para usted pero lamento decir que tardarán algunos dias en llegar.-Eso es algo de esperarse no se preocupe soy un hombre paciente y ¿ Que desea a cambio ?-Me interesa principalmente sus pieles, escuché que
Cristal.Después del bajón de azúcar ya no me he vuelto a sentir mal, Ana me a sobre cuidado en estos días dándome fruta fresca cada mañana y en las cenas incluso me corta la carne en trozos pequeños pero hoy llego a mi limite con sus cosas me acaba de ofrecer una silla de ruedas para dar un paseó, ella tiene una sonrisa en su rostro y enserio creo que esto es lo mejor pero ya es demasiado.-Ana por favor no estoy liciada puedo caminar.-El medico dijo que limitará eso.-Si por eso no he salido a caminar por el jardín en estos tres días pero ya me siento muy bien gracias a tus cuidados y te lo agradezco mucho pero enserio deseo salir un rato a tomar un poco de sol.-Esta bien pero me llevare la silla por si se cansa.-Como gustes.Por fin salgo al jardín bien abrigada y seguida por dos sirvientas con la silla de ruedas, Ana camina a mi lado y me ase comentarios breves sobre el clima, cerca de un arbusto sale Maximiliano dándonos el susto de nuestra vida a todas, me apoyo en el hombro d
Cristal.Esta mañana me desperté con un dolor de espalda insoportable y creo que se debe a que mi vientre a crecido vastante, Ana insistió en que él medico me viera y lo espero sentada cerca de la chimenea tomando un poco de té para calmar mi dolor, a los pocos minutos llega Ana con el medico y mi desayunó, el medico me revisa con paciencia y mucha atención en especial mi vientre cuando termina me mira con una sonrisa risa grande. -Todo parece estar bien su majestad solo que su cuerpo no esta acostumbrado cargar con dos bebes.-Disculpe a que se refiere con dos, no se abra equivocado.-Para nada mi emperatriz escuche dos latidos.-Tal vez se confundió con el mio.-No, el latido de los bebes es diferente al de los adultos, le recomiendo descansar más y dejar las caminatas, use zapatos sin nada de tacon y ropa más suelta y abrigada, el té qué esta tomado le ayudara con el dolor.-Muchas gracias puede retirarse.Las palabras del medico me dejan sorprendida y preocupada a la vez, nunca e
Último capítulo