Capítulo 338
«¿Cómo puede Juan ser tan desvergonzado?»

Eulogio estaba a punto de volverse loco.

Pero era cierto que no podía hacer nada que infringiera la ley.

No por su imagen de personaje público, sino por el bien del Grupo Gómez.

No quería que su familia lo matara a golpes.

Antes de que pudiera reaccionar, Juan le tiró del coche y se subió él mismo.

Juan pisó el acelerador y se marchó enseguida.

Rafael acababa de llegar al bar después de recibir a un cliente cuando vio a Juan marcharse.

Por un momento no supo qué hacer.

No porque Juan se fuera, sino porque vio a Lorena en el coche.

En su mente había emociones muy encontradas.

«El jefe había vuelto a abandonar a su cliente. No importa, no es la primera vez que hace algo así por la señorita Suárez.»

Lorena no se dio cuenta de que Juan entraba en su coche.

Miró al cachorro que tenía en brazos y pensó en ir rápidamente a casa para bañarlo.

Juan miró al cachorro sucio con asco y quiso que lo tirara, pero no dijo nada.

«Está borracha, e
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App