82: La dirección correcta.
Territorio de la manada Golden Crescent.
Alfa Oziel.
Supe que Alan iba a ser una espinilla en el trasero, desde que supliqué al Consejo por una carta escrita a mano, que lo obligara a dejarme llevar a Esther en caso de que no estuviera de acuerdo.
Creo que su hermano se lo dijo primero porque cuando llegamos a la frontera, ya él junto a su Beta y otros Guerreros me esperaban para cortarme el camino.
No entendió razones pero por suerte Maxim es ágil con los autos y pudimos rodearlos y seguir el camino a su casa de la manada. Aunque Maxim no dejaba de recordarme que era probable que no estuvieran allí, sino en la fiesta de Luna Atenea, Lie no paraba de decir que estábamos en la dirección correcta.
Y no se equivocó.
Diosa. Luce tan preciosa, con ese vestido marrón de seda, y su cabello rojizo recogido con una coleta, relevando ese hermoso cuello donde debe ir mi marca.
Pero más hermosa se ve cuando toma mi mano, nuestro toque quema, y sus mejillas se enrojecen.
—Oziel… —gruñe Aslan.
Lo m