Territorio de la manada Golden Crescent.

Alfa Alan Maxwell.

El calor en mi polla todavía sigue por lo que tengo que intervenir. Aslan se siente patético por lo que haremos, pero ya que no hay otra opción, termino pajeandome como un adolescente en el baño, reviviendo los gemidos y la hermosa cara de nuestra compañera hace unos minutos. Luego me subo los pantalones, lavo mis manos y salgo del baño para tirarme sobre la cama y pensar.

Mi mujer es hermosa. Espero que la fiesta traiga buenos resultados…

—¿En dónde rayos está Lavinia? ¿Por qué no está en casa aún? —cuestiona Aslan.

Tomo mi teléfono para llamarla pero en ese momento me entra una llamada, así que la tomo.

—Hermano lamento la tardanza, tuve que llevar a Mikaela a casa porque no se sentía muy bien, pero voy camino a tu manada.

—¿Y Lavinia? ¿Y Esther?

—Se fueron hace un par de horas con el Guerrero Mark a casa de la manada, ¿no te avisaron?

Mi corazón se sale de control, y tengo que cortar la llamada para localizar a Guerrero Ma