141: Sacrificios.
En Pure Moon, la compañera de ex Alfa Duncan intenta mantenerse cuerda al colgar el teléfono, pues ha avisado a todos los que ha podido sobre el ataque. Al salir de su casa privada escucha los gritos y las feromonas que emanan dolor.
El cuñado de Duncan es quien ha tomado el control de la manada desde que su compañero fue condenado, y no solo no quiso creerle cuando ella le contó sobre la bruja, sino que tampoco le hizo caso cuando le pidió que estuviera del lado de Alan.
Y ahora. Todo es un desastre, porque su compañero se dejó llevar por el rencor del pasado, poniéndose de lado de quien no debía; pues Calixto es peor persona de lo que fueron aquellos hombres que atacaron a su hermana Daniella en el pasado.
Está herida, decepcionada, desesperada, pero en el fondo, anhelando tener a su compañero devuelta.
—¡Vayan todos a la frontera de Silver Lake! ¡Ahora! —grita, pero pocos la escuchan, debido al rencor que se ha formado en la manada por las trescientas muertes de sus hombres cuando