59: Nuestro bebé.
Narra Fabiola.
—¿Lista? —me dice el obstetra —. Vamos a darle un vistazo a este bebé…
Mantengo mis manos juntas sobre mis pechos, aunque noto la ansiedad de Diego de tocarme. Me siento totalmente perdida en el momento en el que el frío toca mi bajo vientre. Cuando veo en la pantalla una pequeña mancha, mi cuerpo comienza a tener espasmos por los sollozos.
Voy a tener un hijo. Y no sé si es de Danilo o Diego.
Eso lo único en que he estado pensando desde que leí los resultados en el pasillo. El hecho de solo pensar que Danilo pueda ser el padre me devasta, porque lo único que quiero es hacer mi vida con Diego, y si este bebé es hijo de mi ex, tendré que estar atada a él toda la vida.
No culpo al bebé en lo absoluto. Pero me siento tan idiota. ¿Por qué dejé que se corriera dentro aquella vez en el auto?
Hay una gran probabilidad de que…
—Es apenas un pequeño embrión. Según la evaluación, debe tener al menos unas dos semanas desde su fecundación. Felicidades.
Giro a ver a Diego fin