– Por favor señor Collins, no lo vuelva a intentar – dijo Luar – Lo único que nos une es Ethan, nada más.
– Luar yo aún la amo, jamás he dejado de hacerlo – hablaba con la voz entrecortada el alfa – No podemos al menos intentarlo una vez.
– Yo ya no siento nada por usted señor – dijo de la manera más fría que pudo – Hace mucho tiempo deje de extrañar aquellos momentos que me dibujaban una sonrisa, pero que nunca fueron reales…
– Luar…
– Me deshice de aquellos recuerdos – dejó escapar una amarga sonrisa – Ahogue aquellas mariposas que sentía cada vez que lo tenía cerca, incluso cuando pensaba en usted, así que puse a dormir la esperanza de aquello que nunca tuvo un lugar para habitar – decía en tanto un enorme nudo se formaba en su garganta – Desperté Kim y en el proceso murió todo aquello que no era real.
Cada palabra que pronunciaba le dolía porque sabía que ni una sola era real, pero no volvería a caer, no lo dejaría volver a entrar a su vida como una vez lo hizo, además Alice siemp