Narra David de María
–Por nada madre, claro.
Mientras mi madre subía con Fina Morgan a su recámara, yo me puse a preparar el té y a sacar las cosas de las bolsas que trajo Fina, para ir organizando lo que se iba a preparar, seguramente, sería pizza por el tipo de ingredientes que en ella venían.
Estaba esperando a que se terminara de hacer el té en la cocina, cuando sentí que alguien me abrazaba por la espalda, me di la vuelta y pude ver que era mi adorada Alondra, que había llegado a hacerme compañía.
–Hola mi amor ¿Ya te ha levantado el castigo Carmen? Espero que no se enoje conmigo, por salirme de la recámara antes de que ella me lo pidiera – Dijo Alondra – Pero desperté hace un rato y decidí bajar, para visualizar el panorama.
–Hola mi princesa, de hecho mi madre ya está más tranquila. Estábamos tomando vino y comentando las cosas, con respecto a lo que había pasado.
–Está bien mi amor, ¿Qué son todas esas cosas?, ¿Cocinarás algo delicioso?
Pregunto mi princesa, ya con un poco m