—¿Qué hay que pensar? —preguntó Charly, con el rostro enrojecido por la frustración.

—No lo sé. Solo quiero que le demos una buena pensada, Charly Rubia. —respondió Taylor mientras consultaba la hora—. Debo irme o llegaré tarde a clase.

Taylor se levantó, se echó la mochila al hombro y dijo, —Mejor hablamos de esto después.

Horas después, al entrar a su clase de Análisis Estructural, Taylor vio a Charly, un hombre afroamericano completamente distinto a Charly Raquel Reyes, la rubia a quien accidentalmente le había alquilado la mitad del departamento de Tania.

Se acercó al hombre y preguntó, —Oye Charly, disculpa, ¿cuál es tu apellido?

—Es Solano, amigo —respondió Charly con una sonrisa, extendiendo su mano—. Qué bueno verte otra vez.

Charly rio, y Taylor esbozó una sonrisa mientras estrechaban las manos.

—Lo siento, Solano. No soy muy bueno con los nombres —admitió Taylor—. Me acuerdo que andabas buscando un lugar para quedarte, ¿no? He pensado en rentar la mitad de mi departamento. ¿Te sigue interesando?

—¡Por supuesto! ¡Me encantaría compartir depa contigo! —respondió el hombre con entusiasmo.

"Rayos", pensó Taylor. "Hasta un hombre está emocionado por ser mi compañero de piso, pero la rubia Charly... ¿cuál es su problema?"

Con Solano como compañero, todo quedaba solucionado, así que Taylor dijo, —¡Genial! Puedes mudarte la próxima semana.

Taylor le daría unos días a Charly Rubia para que se fuera. Le explicó a Solano las condiciones del alquiler, —Te cobro 3000 dólares al mes, más dos meses como garantía y uno adelantado...

—¡Vaya! —reaccionó Solano haciendo una mueca—. No puedo pagar tanto. ¡Es demasiado!

—Bueno, ese es mi precio. Es una buena ubicación y el departamento está bien amueblado —señaló Taylor—. Nunca encontrarás un lugar mejor que el mío.

Charly Solano negó con la cabeza y respondió, —Lo siento, Taylor. No puedo, soy hombre. Puedo... vivir en cualquier parte. No voy a gastar tanto solo por una cama.

Le dio una palmada en el hombro a Taylor y concluyó, —Gracias de todas maneras.

***

Al otro extremo de la universidad, Charly pasaba por sus clases con la mente en otra parte. Todavía le costaba creer que, de todas las personas posibles, terminó siendo compañera de departamento del chico malo, Taylor.

Entre clases, revisó nuevos anuncios de apartamentos, pero ninguno quedaba tan cerca y, después de conocer el departamento de Tania, sus expectativas habían crecido. Al final, pensó que tal vez podría tolerar vivir con Ashley y Sofía.

—Sí, puedo resistir con ellas mientras encuentro algo mejor, o aguantarme hasta que termine el semestre. —murmuró Charly.

Decidida, regresó al apartamento que había compartido con Ashley y Sofía, pero encontró la puerta abierta y cajas en el pasillo. Al entrar, se topó con Ashley y Sofía que bajaban acompañadas por Regina, mientras Lucas las seguía por las escaleras.

Charly se quedó boquiabierta. Ver a Lucas con su nueva novia era lo último que esperaba.

—¿Charly? ¿Qué haces aquí? —preguntó Ashley.

Sofia aclaró su garganta y dijo, —Dijiste que estaba bien dejar que Regina tomara tu lugar, así que se está mudando con nosotras.

—¡Ah! —murmuró Charly. Sí, ella había dicho eso, pero aun así, le oprimió el pecho al escucharlo.

—¿Cambiaste de opinión? —preguntó Ashley.

"¿Cambiar de opinión? ¡Ni loca!" Gritó Charly en su cabeza. Tragó saliva antes de responder, —No, no voy a volver. Olvidé algo en mi habitación.

Pasó junto a ellos y corrió a su antigua habitación. Ashley la siguió, así que Charly fingió buscar algo. Al final, encontró una bolsa de ligas que había dejado.

Charly la agarró rápidamente, con la cara sonrojada mientras exclamaba, —¡Mis queridas ligas para el cabello! ¡Cómo pude olvidarlas!

Se giró con una sonrisa fingida hacia Ashley y salió apresuradamente, pero Lucas la siguió.

—Charly. ¡Charly, espera! —la llamó.

—¿Qué? —contestó Charly bruscamente.

—Solo estoy preocupado por ti. ¿Dónde te estás quedando ahora? —preguntó Lucas.

—En un lugar mejor —afirmó Charly—. Con permiso.

Dio media vuelta y se alejó.

Minutos después, de vuelta en el departamento se encontró frente a Taylor.

Charly dijo, —Yo...