Mundo ficciónIniciar sesiónLeonard temblaba. No era un temblor evidente, no uno que un extraño notaría. Era interno. Profundo. Como si todos los músculos que siempre controlaba con precisión quirúrgica estuvieran ahora desobedeciendo a la vez.
Estaba arrodillado frente a Valeria. Arrodillado. Él. Leonard Blake. El hombre que no se inclinaba ante ministros, ni ante accionistas, ni ante magnates capaces de comprar países enteros.
Y sin embargo… ahí estaba. Con u







