Nana se quedó muda por un momento, no estaba segura de qué responder, ¿debía o no contarle todo sobre Ashley a Sofía? Esa era la gran pregunta.
Después de pensarlo bien aclaró su garganta y le dijo:
-Niña, no te vi, ¿desde cuándo estabas parada ahí?
-No hace mucho. ¿Con quién hablabas?
-El niño Michael llamó para avisar que tiene algunas dificultades con algunos socios así que se quedará más tarde, seguro escuchaste mal, yo no mencioné a ninguna mujer.
Sofía entrecerró los ojos, no creía nada de lo que Nana le estaba diciendo. Y nana por supuesto tenía muchas habilidades pero mentir no era una de esas.
-Claro.
(Mmm, estoy segura de lo que oí.)
¡Ring, ring!
El teléfono volvió a sonar, nunca nadie llamaba a casa de Michael, dos llamadas en un día eran demasiado, creyendo que era su esposo Sofía se apresuró a tomar el teléfono antes de que Nana pudiera reaccionar.
-¿Amor?
Al otro lado de la línea nadie contestó, de pronto Sofía se puso nerviosa, si se había equivocado y no era s