-Tal vez debí dejar que alguien simplemente me gustara y conquistarla, supongo que eso habría traído mejores resultados a mi estabilidad emocional ja ja ja. Pero si hubiera sido así no te habría conocido, así que creo que todo por muy malo que haya sido ha valido la pena, cada segundo que pasé sufriendo por esa mujer, vale la pena después de haberte conocido, porque ahora sé qué es lo que no quiero en mi vida y lo que sí.
La mirada de Sofía se tornó suave y comprensiva.
Mordió su labio inferior antes de hablar.
-Yo no tengo nada que aportar a tu familia ni a tu estatus, cuando tus padres sepan realmente quien soy van a odiarme, ¿lo sabes verdad?
-Lo sé, es por eso que aún no se los digo, necesito esperar sólo un poco más hasta estar seguro de que lo que hagan no nos afectará a nosotros, a nuestro futuro o a nuestros hijos.
-¿Hijos?
Los ojos de Sofía se abrieron sorprendidos.
-Sí, hijos. Quiero tener hijos contigo. Una niña y un niño. O dos niñas y dos niños. O tres niñas y un niño o a