CAPÍTULO 124: El DÍA DEL JUICIO
Unos días después…
El día del juicio ha llegado, mi corazón late lleno de ansiedad y anticipación mientras Edward y yo nos dirigimos a la corte. No puedo evitar sentir que todo lo que ha pasado, todo el dolor, todo el sufrimiento, al fin tienen un cierre. Al fin estoy viendo a Leonardo caer, y sin duda lo voy a disfrutar. Dicen que la venganza no es buena, pero lo de él no es solo eso, es la justicia finalmente cumpliéndose y las cosas cayendo el sitio correcto. Necesito ser testigo de cómo enfrenta las consecuencias de sus actos, de todas las mentiras y traiciones que cometió en mi contra por simple odio.
Edward me mira de reojo mientras conduce, su mano se posa sobre la mía, ofreciéndome seguridad y tranquilidad.
—¿Estás segura de que vas a estar bien? —me pregunta, aunque ya conoce la respuesta.
—Sí —respondo sin dudar—. Necesito estar ahí, necesito verlo.
—Solo prométeme una cosa —dice con un tono lleno de afecto—. Si en algún momento te sientes mal,