Capítulo 99. Yo te mato
De igual manera, Felipe no estuvo de acuerdo hasta que el doctor no le dio unos calmantes para que su mujer pudiera dormir, y ahí fue que se tranquilizó un poco. Después de que el médico se hubiera ido, Felipe se le acercó a su esposa y se sentó al lado de la cama y le preguntó: ¿estás bien?
Ella le respondió que sí, y con ganas de levantarme, pero Felipe se lo impidió, diciéndole que por hoy se quedará en la cama, y no se preocupará por nada, que ya los guardas de seguridad estaban investigando quien había puesto aquella ave sobre la cama.
Mariana apenas escuchó decir esas palabras, volvió a temblar como una hoja en el viento, luego Felipe se dio cuenta de que había cometido una imprudencia al mencionarle lo sucedido anterior e inmediatamente la abrazó, mientras le decía cálmate mi amor, yo estoy aquí contigo para que nada malo te vuelva a pasar.
Luego se levantó de la cama, cogió un vaso con agua y le dio un calmante de los que prácticamente le había obligado al doctor a recetársel