Capítulo 70. Su mujer, lo quería matar
Cinthia fue la primera en decir:
—Lo primero es ir al spa.
Y así lo hicieron, se dejaron consentir por unas cuantas horas.
Luego, Verónica le mostró su teléfono señalando el restaurante al que quería ir.
—No saben las calificaciones que tiene —dijo entusiasmada—. Además, dicen que sirven unos platos de muerte.
Cinthia la miró con una sonrisa burlona y le respondió:
—Raro sería que no nos hubieras llevado de restaurante en restaurante, probando la gastronomía de este país.
La aludida contestó:
—Es que no he terminado de probar todos los platillos del chef de la casa… y déjame decirte que hace unos postres de infarto también.
De pronto, recordó que tenía algo pendiente con aquel chef y, con asombro, exclamó:
—¡Oh! Se me había olvidado que me dijo que hoy me iba a preparar el mejor plato que haya comido en toda mi vida.
Verónica, sin perder tiempo, sacó de inmediato su teléfono para llamarlo y decirle que le guardara lo que fuera que preparara, que apenas llegara, lo probaría sin falta.