Capítulo 39.- Por lo pronto… vete.
Evelia
Saber que no tengo que ver a Oliver hoy en la mañana me tranquiliza, no sé si podría soportar estar con él a solas en un lugar tan estrecho como lo es el auto.
El camino hacia el trabajo se había vuelto un ritual maravilloso, en el que “él y yo compartíamos secretos y compartíamos amor, un amor inexistente, un amor inventado” Pienso con nostalgia.
En un intento por ignorar mis sentimientos, mantengo mi cara en alto y respiro profundo sabiendo que para Oliver puedo ser la persona responsable de todo este caos, pero llena de deseo de comprobar que no es así, que me cree.
Unos metros antes de llegar al imponente edificio Geacoman, soy sorprendida por alguien que me toma del brazo y me lleva a un pasillo, entre jalones, no tengo tiempo de gritar demasiado y pedir ayuda, me asusto momentáneamente hasta que veo quién es la persona que me está jaloneando.
Fiona, y eso me tranquiliza instantáneamente.
— ¡Ah! — Grito por el impacto de sus jalones.
— ¡¡Shhh!!— Sisea ella desesperada por m