Capítulo ochenta y uno: Mala decisión.
Salí de ahí conteniendo el oxígeno en mis pulmones, me dolía ser tan brusca con él, pero no me dejaba opción, su romance con ella me dolía y no quería verme como la despechada en esta historia.
En este momento solo quería ser la responsable de llevar a los culpables frente la justicia, no de terminar una relación que comenzó en mi ausencia, solo quiero que los que amo estén bien y por eso estoy aquí, a pesar de todo me conformo con verlos felices.
Hasta que mis planes finalicen, en ese momento decidiré que hacer conmigo, si quedarme o tomar vuelo a otro sitio y empezar de cero.
—¿Matt?, ¿qué haces aquí? — su vos me saco del abismo donde ella me había dejado,
— Nada Lupe, solo vine a hablar de algo con Fernanda, pero no estaba.
— Mmm, está bien; solo vine a recordarte que tus pacientes de las 15 ya te están esperando— comento apuntado al reloj en su muñeca,
— Bien, ya voy— luego de verla partir, respiré hondo y salí de ahí, chocándome de frente con un imbécil más,
— Si