Te juro

Alexander estaba furioso, dolido, porque ella no tenía idea de la forma obsesiva en que había imaginado ese momento. Aunque dicho sea de paso, jamás consideró una respuesta como esa, porque después de todo ella había accedido volver, ¿no era así?

Trató de controlar su temperamento y decidió escuchar para ver que suelo estaba pisando en realidad, así que preguntó con cautela:

—¿Qué quieres decir?

—Sander, Hunter y yo…

—¿Hunter y tú? —repitió en forma de interrogante como un imbécil, pero no pudo disipar la furia en su voz—. ¡¿Acaso quieres irte con él?! —Articuló al final, sus propias palabras era como veneno mientras salían de sus labios.

—¡No! —chilló abriendo los ojos de más.

—¿No? Entonces, ¡¿qué demonios quieres decir al nombrarlo así y ahora?! —gritó.

Su confusión no se acercaba en lo más mínimo a sus celos, pero ambos eran enormes e imposibles de dominar.

—¿Mami? —Abi apareció frente a ellos con los ojos brillantes y él se sintió un monstruo por haber gritado y asustarla.

Su hi
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App