Eugenia María
Habíamos ingresado todos a ver a Emmanuel, Mapa y Alexey eran los únicos que faltaban. No debían de demorar, según lo dicho por Eros. Nos encontrábamos en la expectativa de ver a la reacción de mi hermano con su hijo. Y en parte yo también tenía una nueva noticia por contarles. No me había atrevido a contarle nada a Egan.
Pero volvía a estar embarazada. Y quiero decirle primero a él para luego contarle a la familia. De hecho, había comprado tiquetes para mañana en la noche, la idea era llegarle de sorpresa, solo que ahora, con la noticia de mi hermano y de Perla, no me parecía justo irme. Debía de apoyar a mi familia.
Por eso deberé comentarle por teléfono… No me podía esperar una semana para darle la sorpresa en persona. La alegría fue inmensa al poder abrazar de nuevo a mi hermano. Las lágrimas no pude ocultarlas, era inevitable hacerlo.
—No vuelvas a asustarme de esa manera.
—No lo haré.
Me besó en la frente. Estaba sentado en una habitación, aun con algunos cables pu