—Liora sí tenía algunas quejas al respecto, pero no se encontraba bien físicamente… Así que pensé que lo mejor era esperar hasta que terminara sus exámenes médicos antes de hablar de cualquier otra cosa —respondió Kiros con calma.
—Esto tenía sentido. Lo importante es tomárselo con tranquilidad. Siempre que haya comunicación entre ustedes, las cosas solo pueden mejorar con el tiempo.
En ningún momento se me había pasado por la cabeza interferir en la relación entre Kiros y Liora, ni mucho menos intentar separarlos.
De hecho, si soy sincero, en realidad esperaba que les fuera bien y que pudieran envejecer juntos.
Últimamente, mi mentalidad había cambiado demasiado.
Al igual que Paula, quería dejar atrás las malas costumbres y alejarme un poco de cualquier tentación.
Después de todo, sin la capacidad de sostenerme por mí mismo, ni siquiera tenía derecho a pensar en placeres superficiales.
Al final, todo se reducía a una simple verdad: primero debía mejorar como persona.
Charlamos un poco