Emancipación.
Ana llegó a casa, sintiendo el peso de la tarde en sus hombros. Magda la recibió con una taza de café humeante y la hizo sentarse en el sofá. Luego de preguntarle cómo le fue y oir un poco sobre lo feliz que pudo sentirse en la oficina se decidió a contarle sus pasos los últimos días.
—Tengo mucho que contarte —dijo. Su voz se siente llena de emoción.
Ana, intrigada, se acomodó junto a ella.
—Dime, ¿qué es tan importante que parece que te mueres por revelarme? ¿Es sobre Pablo y Sofía?— pregunta y prueba el café. Está exhausta.
Magda sonrió con satisfacción. —Sí, por supuesto. Te dije que Iba a investigar.
—Lo Supuse... Entonces, por favor, háblame. ¿Qué es lo que has descubierto?
—Desde hace semanas estoy en contacto con Ginger.
—Mmm... Y ¿Quién es Ginger? —preguntó Ana, frunciendo el ceño.
—Ginger es nada más y nada menos que la nueva amante de Pablo. Fui a la empresa y fingí buscar empleo. Fue muy fácil.
—¿Es la misma que vimos hace semanas en su auto? —Ana se muestra sorprendid