Lyaus hizo una mueca de desagrado, que fue notada por uno de los trabajadores – La retiro señor- Señalando el biombo.
-Si- -No- Respondieron al mismo tiempo Lyaus y Selini.
-Déjelo ahí- Termino diciendo Lyaus, cediendo ante la presión de la mirada de ella.
Salieron los mozos de la habitación, y volvieron a entrar cargando una mesa y sillas, y varios platillos, que dejaron en la mesa, junto a una jarra de vino y una de cerveza.
-Muchas gracias- Les dio dos monedas de bronce, como propina, Los Mozos sonrieron y se retiraron con una reverencia, tomando en cuenta que una moneda de bronce es el pago de un día de trabajo.
Una moneda de plata equivale a cien monedas de bronce, y una moneda de oro equivale a cien monedas de plata. Esa son las monedas oficiales del reino, hay monedas de menor denominación, pero esas ya son reguladas por cada pueblo o región.
-No me mires- Lo amenazo, mientras ella se quitaba la ropa y se metía a la tina.
-Tu a mi si me puedes mirar, solo tienes que pedirlo-
-Q