Capítulo 38: El precio a pagar.
— Feliz Halloween. — musitó Arianna mientras miraba aquellos boletos del gotcha que había visitado con Leonardo.
La fiesta había terminado, y las hortensias rojas y blancas que habían sido usadas para la decoración, aún permanecían frescas. Su aroma era embriagante, y la textura aterciopelada de sus pétalos, era agradable al tacto.
— Dios, querida, te sacaste la lotería con ese hombre. — dijo Ramon repentinamente.
Sonriendo, Arianna no respondió. ¿Era así? El ronroneo de Bolita la distrajo momentáneamente, acariciándolo, se río al verlo vestido para la fecha. Leonardo Prego había pensado en todo.
— Creo que no es tan malo como pensé que sería. — dijo Arianna espontáneamente.
Ramon, ya con la pijama puesta, se río de su despistada mejor amiga.
— ¿Qué no es tan malo? Cariño, este hombre se contactó conmigo y me pidió que buscará a nuestros viejos amigos, luego mandó a su secretaria y a varios hombres a decorar todo este lugar, incluso pensó en el barrigón de Bolita, ordenó una cantidad