Capítulo 13: Preparando un escenario.
Como un desesperado, Renato daba vueltas una y otra vez en el estudio de su padre, como si estuviese marcando sus pasos con enorme insistencia. Arianna y Leonardo no podían estar juntos, pero recordarlos tomados del brazo lo hacía rabiar de celos. De ninguna manera iba a permitir que ellos se enamoraran…Arianna era suya; solo él debía de tenerla y nadie más…mucho menos aun su odiado hermano gemelo.
Desde que eran niños Leonardo siempre había destacado por la fuerza de su carácter y cuerpo, su inteligencia y rebeldía...siempre logrando ser el favorito de la madre de ambos que no dudaba en alabarlo, en cambio, él era el gemelo débil, enfermizo; aquel al que todos parecían tratar como una peste a la que querían lejos, su padre tampoco era una excepción en ese tiempo, todos estaban impresionados por las cualidades natas de Leonardo, que él se sentía cada vez más y más pequeño.
Por ello, había aprendido a mentir, a culparlo de todo lo malo que el hacía, y poco a poco fue logrando que todos