84. Tu peor pesadilla
— Señor, ¿Aún está enojado conmigo? —preguntó Charlotte, saliendo del baño con el pijama y el collar que siempre tiene en cuello.
— No estoy enojado contigo, solo déjalo pasar —el alfa se dio la vuelta—. Es con Michael con quien tienes que hablar, no conmigo.
— Claro que lo está. Si no fuera así no me estuviera dando la espalda cuando estoy hablando con usted, eso es de mala educación.
— Ya te dije que dejes las cosas por las buenas y ya —advirtió aún de espalda.
— ¡Y yo le dije que no! —gritó, y Damián se dio la vuelta, enojado—. No se atreva a meter a Michael en esto, porque no tiene nada que ver.
— ¿Cuál es la regla siete Charlotte? —preguntó, agarrándola del brazo.
— Jamás levantarle la voz a mi amo, y tampoco faltarle al respeto —susurró—. Es que me estás ignorando y me siento mal, en verdad.
— Es mejor que te duermas, ya que mañana tienes que ir a la universidad.
— Eso ya lo sé. Pero eso no tiene nada que ver con lo que estábamos hablando —Damián solo pudo rodar los ojos.
— Sí,