Ella deja de acariciar su vientre y toma mi mano diciendo que estaba feliz de al fin poder conocerme, no pude evitar sonreír porque ella era dulce y amable. Ella le dice que irá por algo de café y el asiente, cuando vuelve a verme puedo ver que quiere hacerme muchas preguntas respecto a lo que me estaba pasando y lo que pasó en su ausencia.

Al llegar al hospital entré con prisa sin siquiera ver por donde iba y en mi búsqueda por encontrar a megan, tropecé con una mujer que venía de la cafetería, el café que traía se esparció por el suelo, era de la misma compostura de Megan, solo que ella era pelinegra de ojos negros

—El café…

Ella me miró brevemente hasta que una enfermera se acercó a ella llamando su atención, ignoré ese accidente y busqué a megan hasta que pude encontrarla, se encontraba con su hermano, al entrar a la habitación ambos me miran confundidos por mi presencia. Estaba por decir algo cuando escuché que alguien más había entrado a la habitación, el hermano de meg