Cap. 178: Una noche con el jefe. Un bebé inesperado.
Cap. 18: Esas cifras pertenecen a Callahan Corp.
Marie estaba sentada en el sofá con las piernas recogidas, una manta sobre las rodillas y una caja de mochis a medio acabar sobre la mesita de centro. Había dejado el portátil en pausa, el archivo del plan financiero aún abierto en la pantalla. Nathan la observó desde la entrada, con una sonrisa tranquila. Se acercó en silencio, le acarició el cabello con suavidad y se sentó a su lado.
—¿Ya pasó la tormenta? —preguntó, con una media sonrisa divertida.
Marie rodó los ojos, aunque en sus labios se asomaba una curva leve de resignación.
—Depende… si vuelves a olvidarte de mis antojos, podría volver —dijo en tono seco, pero sin rabia.
Nathan soltó una pequeña carcajada y se acercó un poco más, acariciándole la rodilla por encima de la manta.
—No volverá a pasar. Lo prometo… pero dime, ¿cómo va el plan financiero?
Marie lo miró con una ceja levantada, y suspiró. Su expresión cambió, volviéndose más seria.
—Estoy haciendo lo que me pediste —r