-¡Adam!
-¿Si?
¿Qué … ? ¿Qué sucede… Emma?
-¿Cómo que, qué?
Estabas distraído. ¿A quién viste?
-¿Eh?
¡Oh! ¡No..! A nadie…
-Ya veo.
¿Me puedes llevar al departamento?
-Claro, bonita.
Subí al auto con él y me llevó al departamento, durante el camino no dijo una sola palabra, se veía diferente, no era ese Keller que yo acostumbraba ver, era otro, ausente, perdido. A quién sea que haya visto le causó una gran impresión.
Llegamos al departamento y lo invité a pasar, no accedió, simplemente se despidió y se fue… Había dicho que cenaríamos con mis padres para discutir el compromiso, no pasará, por lo menos no hoy.
Han pasado tres semanas desde que acordamos casarnos, en esas tres semanas no he recibido un sólo mensaje de Adam, tampoco se ha aparecido por aquí, tengo el presentimiento de que ya se arrepintió, tal vez eso esté relacionado con su actitud de aquel día en el hospital.
He intentado decirme a mí misma que no pasa nada, que todo está bien, que era de esperarse, pero la verda