Capítulo 238: Te amo y no renunciaré a ti.
Después del abrazo subimos las escaleras y me sentí un poco rara, mi pobre cabeza daba vueltas, Adam estaba igual.
-Emma...
-Dime...
-¿No sientes algo raro?
-¿Si te refieres a mi cabeza?
Si, me da un poco de vueltas y está pesada.
-Ven.
Me tomó de la mano con urgencia y me arrastró con rapidez hasta su habitación.
-¿Qué es lo que pasa Adam?
-Creo que alguien nos drogó?
-¡¿Qué?!
Yo no podía creerlo.
¿Quién sería capaz de hacernos algo así?
-Pero por qué...
Yo estaba hablando cuando alguien tocó la puerta de la habitación.
-¡TOC, TOC!
-¡TOC, TOC!
Adam pegó su cuerpo al mío y me cubrió la boca con una de sus manos.
Con los ojos y la boca intentó decirme que me callara.
-¡TOC, TOC!
-¡TOC, TOC!
Volvieron a tocar pero no respondimos.
Después de eso, Adam le puso el seguro a todas las puertas de la habitación y tomó su teléfono, hizo una llamada.
*
-Alguien drogó mi bebida.
-¿Qué?
-Lo que oíste, pero no tengo tiempo de hablar, sólo pídele a un par de guardaespaldas que suba y se mantenga en