-El placer es todo mío señorita Smith.
-Ah... Por favor pase, tome asiento.
-Muchas gracias.
Permítame decirle que su pastelería tiene un diseño muy agradable a la vista.
Me ruboricé, aunque los clientes hacían cumplidos a mi pastelería, recibir un cumplido de alguien como Nahim era invaluable para mí.
-Le agradezco.
-¿Podría mostrarme su menú?
-¡Claro! ¡Qué distraída!
Le entregué el menú y me moví por distintas áreas en mi pastelería, estaba nerviosa pero intentaba disimularlo.
Cuando Nahim terminó de leer el menú me sonrió.
-Ya estoy listo para ordenar señorita Smith.
-Perfecto.
¿Qué desea qué le prepare, señor Johnson?
-Quiero una cosa de cada una de las opciones del menú.
-...
No podía creerlo, en verdad no podía creerlo.
Me tomó por sorpresa y mi expresión lo dijo todo, porque en cuánto me vio me sonrió y soltó una carcajada.
-Ja ja ja. ¿Sorprendida?
-S… Si.
-A decir verdad Emma, estoy aquí porque estoy buscando un chef repostero.
Verás, inicialmente vine a la Ciudad porque padez