-Estoy listo, he probado todo.
Sólo un bocado y sólo un sorbo han bastado.
¿Estás lista para escuchar mi veredicto, Emma Smith?
-Si, señor Johnson.
-Mi veredicto es… Contratada.
Ahora, hablemos de mi oferta.
Mis ojos se abrieron.
-Ya te he contratado pero debes aceptar.
Lo que te propongo es lo siguiente, me gustaría que fueras algo así como mi chef repostera asociada, es decir, sé que tú pastelería es nueva y no tengo intenciones de hacer que la cierres.
Lo que quiero es que trabajes conmigo y para mí, si puedes hacer postres para mi restaurante y para tu pastelería al mismo tiempo, te contrataré como un chef estrella y aún podrás atender esta pastelería.
-...
-Ja ja ja. Tu rostro es un poema, uno muy bello.
Me puse de mil colores, no sabía que decir ante tal oferta. Miró su reloj.
-Tengo que irme, señorita Smith.
Pero volveré si usted me llama, piense en mi oferta.
Le dejo mi tarjeta, si acepta o desea discutir los términos de esta oferta llámeme y vendré a verla.
No deje escapar e