Capítulo 111: Resultados de infarto.
Las palabras se escucharon tan lejanas a pesar de tener al lado a la persona que estaba hablando.
¿Embarazada? ¿Yo?
—No, no, es imposible —respondí demasiado rápido, pasando el pañuelo por mis labios.
Pero, ¿en realidad era imposible?
Frederick y yo hemos tenido intimidad. ¡Santo cielos, era su amante secreta!
Ni siquiera recordaba cuando fue mi último periodo. Los vómitos, las náuseas. Estuve culpando a la gastritis todo este tiempo pero, ¿y si esa no era la razón?
Estuve tan concentrada en el maldito diagnóstico de la hepatitis autoinmune que olvidé por completo los demás factores.
Negué con la cabeza, incapaz de creerlo. Mi mano fue a mi vientre en busca de alguna sensación, en busca de algo que me indicara que había un bebé creciendo. Pero nada, no sentía nada. Y aún así, mi corazón comenzó a latir con prisa, golpeando mi caja torácica con fuerza.
Un bebé de Frederick…
—Deberíamos aprovechar que estamos acá y hacerte los análisis —dijo, rascándose la cabeza.
Miré el laborato