Capítulo 60— Las personas cambian
Narrador
A pesar de que Eira trató de convencer a Rachel de lo contrario, no hubo poder humano que lo lograra. Ella seguía empeñada en alejarse de Iker, lo cual era una verdadera estupidez debido a lo que sentía por él. Por otra parte, decidido a ganarse el corazón de Eira, Adams se esforzaba cada día para lograrlo, desde llenarla de regalos hasta ayudarla a hacerse conocer cada vez más entre los grandes empresarios de la ciudad, lo cual Drayton, con su inteligencia y facilidad para negociar, logró sin mayor esfuerzo.
—Señora Drayton, el señor King acaba de llamar. Quiere confirmar si lo acompañará esta noche a la gala benéfica.
En medio de una reunión importante con Vael, Eira apretó sus labios antes de responderle a la mujer que permanecía a la espera de una respuesta y, bajando su rostro, sopesó si acceder o no.
El problema radicaba en la atracción que sentía Eira por King, esta se estaba transformando en algo más, y era esto lo que la estaba ater