Después de la propuesta de matrimonio por ambas partes, la pareja anhelaba un poco más de intimidad.
_ Anna, aún conservo la habitación del hotel _ le dijo sonriendo Alonso mientras le acariciaba el rostro a la joven _ No sabía que tal nos iría en la convivencia, así que aún la tengo... ¿Quieres que vayamos allí, para poder estar un poco más tranquilos?
_ Hmm... ya sabes que por ahora no podemos hacer nada _ le dijo Anna divertida _ no tengo que explicartelo.
_ Lo sé... pero ambos sabemos, que hay otras cosas que podemos hacer _ le susurró al oído de manera seductora _ Digo algo así como el preludio de reconciliación y matrimonio... sabes muy bien que nunca te haría daño... Solo me gustaría estar contigo, te he extrañado tanto.
Mientras él le decía todas esas cosas y muchas más al oído, ella se sonrojaba a más no poder. Alonso siempre parecía tan serio y reservado pero con ella, era totalmente distinto.
_¡Alonso eres lo más parecido a un sátiro! _ espetó la muchacha dandóle una s