Ronie.-
Luego de ver el arresto de Fedora en la televisión tenía que asegurarme que no fuera delatarme y saber de una buena vez ¿Dónde tiene escondida a la mocosa? Para desaparecerla yo misma.
— Sabía que vendrías –La veo acercarse esposada con un traje de color naranja, tiene ojeras y ojos cansados. –Vas a ayudarme a salir de aquí –Me río en su cara.
— No, solo vine para que me digas donde tienes a la bastardita
— ¡Oh! ¿No te has enterado? –Fruncí mi ceño. –Mi sobrina ya recuperó a la mocosa
— ¡¿Qué estás diciendo?! –Golpeé la mesa llamando la atención de una de las custodias.
— ¿Por qué crees que estoy aquí? ¡Fue ella la que me metió aquí!
— Eso no puede ser, si se acerca a Jacob con esa niña
— Mas te vale a que me ayudes o voy a llamar a Morgan y le diré todo –Me giró poniéndome cerca de su rostro.
— ¡Tú no vas a decir nada!
— Entonces ayúdame, esa maldita me ha quitado todo mi dinero, no tengo para pagar un buen abogado
— Lo enviaré en unos días –Me giré para salir de ese asqueros