CAP.31 El Celo.
Mientras Lizbeth seguía dormida sin nada que la molestará, las visiones de sus vidas pasadas cada vez son más frecuentes y claras.
***Visión de una vida pasada:
Caminaba montada en un caballo por en medio del bosque nevado, el paisaje era casi en su totalidad blanco, los pinos y matorrales verdes era lo único que resaltaba, una pequeña nevada caía aumentando el nivel de la nieve.
Un hombre guiaba las riendas del corsel y parecía no ser afectado por el clima.
—¿Quieres dar un paseo de verdad?— propuso el hombre lobo.
—¿Con tu lobo?— le dijo ella y al verlo asentir se emocionó —Claro que sí— contestó.
Él tomó su forma lobuna y ella lo montó feliz, recorrieron el bosque con calma disfrutando del camino y de la compañía de ambos sin notar el mal clima corrían por la taiga.
Ya arriba del gran lobo la vista de Lizbeth era diferente. Se sujeto del suave pelaje y él lobo comenzó su marcha.
Mientras avanzaban el lobo corría cómodamente con ella a cuestas, saltaba y esquivaba obstáculos a gran