—No, mami. Te veías hermosa —dice Rebel y escucho a varias mujeres en la sala de espera reírse y decir "aww". Rebel es un encanto, pero esa boquita suya algún día la va a meter en problemas.

Ryder me ayuda a llenar los formularios, y ahora solo nos queda esperar nuestro turno. Miro la pantalla del televisor, que solo muestra información del hospital y sobre los grupos para futuras madres y sus parejas.

—Angel Moretti —llaman mi nombre y todos en la sala de espera se quedan boquiabiertos. No todos los días se ve a la hija de personas tan poderosas. Me levanto mirando a Ryder, quien sostiene la mano de Rebel, y caminamos hacia la mujer con uniforme rojo. Nos conduce a una habitación con luz tenue.

Me pregunta mi nombre completo, fecha de nacimiento, las preguntas habituales, cuándo fue mi último período. Una vez que he respondido, me indica que me acueste en la camilla y me levante la blusa.

Ryder y Rebel me miran atentos. La técnica baja un poco la cintura de mis jeans y cubre la zona