NARRADOR:
El ambiente en el pequeño cuarto era denso y estéril. Eloise se levantó cuando la puerta se abrió. Su encierro no había mermado su arrogancia, solo había alimentado su desesperación y odio por Nea.
Al ver a Logan entrar solo, creyó que había ganado.
—Logan, cariño—dijo con un alivio desesperado, mientras se acercaba —Sabía que me sacarías de aquí ¿Has resuelto el problema? Te juro que lo hice por ti. Por nuestra familia.
Logan cerró la puerta. El clic del cerrojo sonó pesado, separándolos del resto del mundo. Su rostro no mostraba la rabia del líder, sino la profunda decepción denla traición.
—Resolví el problema con Anton —dijo Logan, su voz baja y uniforme, pero cortante como hielo. Luego miró los ojos febriles de Eloise —Tú causaste la alergia a mi hijo, Eloise. Lo hiciste porque no podías tenerme. Lo hiciste porque mi felicidad te parecía una afrenta.
—¡Ella te manipula! ¡Es una intrusa! —gritó Eloise, su amor enfermo convirtiéndose en histeria —¡Yo soy tu familia!