Después de una salvaje y linda mañana para el mafioso. Se permitió ser de ayuda para su querido prometido.
-Entonces ¿Qué te gustaría desayunar? O… ¿Quieres que nos desayunemos? – Ante tal segunda opción, recibió un ataque inminente por parte de una acojinada almohada. Esta acción del japones provoco que la risa de Nicolas. – Entiendo, comida normal. A mí me apetece pan tostado, jugo, fruta en yogurt, y tu… supongo que lo mismo –. Indico mientras se dedicaba a cargar con cuidado a Kyoshi para ayudarlo a bañarse y poder darle un masaje para su cadera.
-Ah…
-Ya sabía yo que tenías voz –. Decía Nicolas al momento de besar la espalda de Kyoshi en un consuelo por el dolor que sentía por el sexo y como se lo quitaban con ese masaje tan gentil –. Qué lindo…
-Tengo hambre… –. Le hizo saber Kyoshi en señas, donde Nicolas le observo confundido y en eso recordó una de las señas que había practicado con el japones, el significado de hambre o comida para que este fuera practicando.
-Ya voy car