**CAPÍTULO 22**
La luz anaranjada del sol desaparece y es reemplazada por la oscuridad de la noche. La habitación se vuelve completamente oscura, dejando a mi imaginación la tarea de imaginar monstruos en los rincones.
Va a ser exactamente como en casa. Golpes constantes, el miedo constante de sentir dolor la próxima vez.
No teniendo nada más que hacer, me arrastro patéticamente hasta la esquina de la habitación. Me siento un poco más segura ahora que sé que no puede aparecer detrás de mí.
Nunca se sabe, Jared podría estar sentado frente a mí, por lo que sé. Podría estar planeando su próximo ataque, su próxima amenaza, a solo dos pasos de mí.
Al abrazar mis rodillas contra mi pecho, trato de mirar frenéticamente a mi alrededor para asegurarme de que no haya nadie aquí conmigo.
Siento mi respiración acelerarse con la constante preocupación de un ataque, la constante preocupación de cometer un error y hablarle a alguien sobre esta noche. Que Greyson y Faye mueran por mi culpa.
Sollozo,