Capítulo 65 —No había sido solo deseo…
Narrador:
Maya cerró los ojos con fuerza y se llevó las manos a la cabeza, tratando de contener el caos de pensamientos que la invadían. Sentía el corazón desbocado, la respiración entrecortada, el peso de la revelación aplastándola contra la realidad. No podía quedarse ahí. Se puso de pie con brusquedad, ignorando la mirada fugaz de los adolescentes que, al notar su agitación, se separaron del beso y la observaron con curiosidad. Maya dio unos pasos torpes hacia la calle, sus zapatos resonando contra el pavimento húmedo de la noche. Tenía que irse. Tenía que alejarse. Pero, ¿a dónde? Por primera vez en su vida, no tenía respuestas. Sin darse cuenta, sus pasos la dirigieron a donde siempre terminaba cuando todo en su mundo se volvía un desastre. Liam. Su departamento no estaba lejos. Lo conocía tan bien que podría llegar con los ojos cerrados. Su cuerpo se movió por pura inercia, su mente debatiéndose entre el deseo de correr a él y la necesidad