Capítulo 183
—Cuñada, Alex te preparó el desayuno, ¿no quieres venir a comer un poco? Ya lo probé, y te aseguro que está delicioso.

«¿Que ya lo probó?»

Entonces, ¿toda esa comida en la mesa eran las sobras de Jimena?

La mirada de Sofía recorrió la mesa de arriba abajo, deteniéndose en ella, que comía con deleite. Sintió un mareo repentino y asco.

Pero Jimena parecía no percatarse de nada, absorta en su propio y radiante buen humor.

—¡Hace tanto que no probaba la comida de Alex! Ahora que estoy de vuelta, pienso comer hasta hartarme.

—Tranquila, no hables como si pasaras hambre.

Alejandro, que salía en ese momento, escuchó el comentario y no pudo evitar responder.

Él sabía perfectamente de qué familia provenía Jimena; no eran precisamente de escasos recursos.

Pero ella era así, solo había sido malcriada por su hermano, y por eso se comportaba de manera tan caprichosa e impertinente.

De eso, Alejandro estaba muy consciente.

Sofía contempló la mesa, sintiendo el ambiente pesado. No tenía el más mínimo
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App