Drew se intentó comunicar con Emily durante los siguientes días pero no tuvo éxito. El no tener noticias de la morena empezaba a fatigarlo pese a saber que lo había engañado desde el principio.
Se había mantenido en contacto algunas veces con Marceline para disculparse por el accidente y velar por la reposición del vehículo destrozado, después de todo había sido la agraviada y su auto había pagado el precio de la impulsividad de Emily.
–Ya no tienes que preocuparte por el dinero para la reparación de mi auto. –Le dijo Marceline a través del celular.– El señor Henry Hammil me envió en la mañana un cheque con una suma increíble de dinero.
La cantidad exorbitante de la que habla