Salió cojeando de su habitación y entró en su habitación. Miró su camisa y rápidamente se cambió y se puso su camisa y luego tomó un pijama de su armario y se lo puso.
Su cama le parecía bastante atractiva. Tal vez debería dormir aquí.
Estaba a punto de subirse a la cama cuando se escuchó un golpe antes de que la puerta se abriera para revelar a Draken sin camisa, lo que hizo que sus ojos inocentes se abrieran cuando al instante miró hacia otro lado.
No dijo nada sin preguntas, sin argumentos. El simplemente se acercó a ella. La tomó en sus brazos al estilo nupcial antes de regresar a su habitación.
La colocó en la cama y ella notó un botiquín de primeros auxilios allí también.
—Súbete la camisa hasta el pecho —el instruyó y ella lo miró estupefacta.
—Charlotte lo hizo ayer —dijo Sofía.
—El doctor dijo que los cambiara todos los días —dijo y ella dudó.
—Puedo hacerlo yo misma —murmuró y él levantó sus ojos de ónice para encontrarse con su mirada.
—Déjame hacerlo, Sofia —su voz profund